Hidroclorotiazida

¿Qué es esto?

Compuesto

La hidroclorotiazida está disponible en tabletas de diferentes concentraciones. El principal componente activo del fármaco es la hidroclorotiazida, que proporciona su efecto diurético y antihipertensivo. La composición también contiene excipientes, que pueden variar según el fabricante, pero que suelen incluir:

• Lactosa monohidrato
• Almidón de maíz
• Estearato de magnesio
• Talco
• Gel de sílice coloidal


Estos excipientes no tienen un efecto activo en el organismo, pero ayudan a formar el comprimido y aseguran su estabilidad y durabilidad.

¿Cómo tomar?

La hidroclorotiazida debe tomarse estrictamente según lo prescrito por su médico, teniendo en cuenta la dosis y el régimen prescritos. Normalmente los comprimidos se toman por vía oral, una vez al día, preferiblemente por la mañana, para evitar las visitas nocturnas al baño. El medicamento se puede tomar con las comidas o con el estómago vacío, con suficiente cantidad de agua.

Recomendaciones básicas de uso:

1. Siga la dosis prescrita por su médico y no la cambie usted mismo.
2. Tome el comprimido a la misma hora todos los días para un mejor control de los síntomas.
3. Haga No deje de tomar el medicamento repentinamente, incluso si se siente mejor, sin consultar a un médico.

La dosis olvidada debe tomarse lo antes posible a menos que sea hora de tomar la siguiente dosis. En este caso no se debe duplicar la dosis.

¿Cómo funciona?

La hidroclorotiazida actúa como diurético y afecta la función renal. Bloquea la reabsorción de sodio y cloruro en los túbulos de la nefrona, lo que resulta en una mayor excreción de estos electrolitos en la orina. Después del sodio, el cuerpo también pierde agua, lo que reduce el volumen de sangre circulante y reduce la carga sobre el sistema cardiovascular.

Además, el fármaco ayuda a reducir la resistencia vascular, lo que también conduce a una disminución de la presión arterial. A través de sus complejos efectos sobre el volumen de líquidos y la resistencia vascular, la hidroclorotiazida reduce eficazmente la presión arterial y reduce el riesgo de complicaciones asociadas con la hipertensión, como accidentes cerebrovasculares y ataques cardíacos.

Indicaciones

La hidroclorotiazida se receta para tratar diversas afecciones asociadas con la retención de líquidos y la presión arterial alta. Las principales indicaciones de uso incluyen:

• Hipertensión (presión arterial alta), tanto en monoterapia como en combinación con otros medicamentos antihipertensivos.
• Síndrome edematoso causado por insuficiencia cardíaca, enfermedad renal o hepática, además de tomar ciertos medicamentos.
• Diabetes insípida: para reducir la poliuria (producción excesiva de orina).
• Síndrome premenstrual, acompañado de hinchazón y retención de líquidos en el cuerpo.

La eficacia del fármaco se debe a su capacidad para eliminar el exceso de líquido y reducir la presión arterial, lo que ayuda a mejorar el bienestar general y reducir el riesgo de complicaciones cardiovasculares.

Contraindicaciones

El uso de Hidroclorotiazida está contraindicado en algunos casos donde su uso puede provocar efectos secundarios graves o agravar enfermedades existentes. Las principales contraindicaciones incluyen:

• Hipersensibilidad a la hidroclorotiazida u otros componentes del medicamento.
• Insuficiencia renal grave, en la que la capacidad de filtración de los riñones está alterada.
• Anuria (falta de orina) ) es una afección en la que la toma de diuréticos no es eficaz.
• Formas graves de insuficiencia hepática, incluido el coma hepático.
• Hipopotasemia (niveles bajos de potasio en la sangre), que puede empeorar con diuréticos tiazídicos.

Efectos secundarios

Al igual que todos los medicamentos, Hidroclorotiazida puede producir efectos adversos, aunque no todas las personas los sufran. Las reacciones adversas más comunes están relacionadas con cambios en los niveles de electrolitos y pueden incluir:

• Hipopotasemia (disminución de los niveles de potasio), que puede manifestarse como debilidad, fatiga, calambres musculares.
• Hiponatremia (disminución de los niveles de sodio), que puede provocar mareos, náuseas, dolores de cabeza.
• Sequedad de boca y sed, que se asocia con una mayor excreción de líquidos del cuerpo.
• Orina frecuente, especialmente en los primeros días de tratamiento.
• Aumento de los niveles de ácido úrico en la sangre, lo que puede provocar una exacerbación de la gota.

En casos raros, pueden producirse reacciones alérgicas como erupción cutánea, picor o angioedema. Si se producen efectos secundarios graves o signos de alergia, debe consultar inmediatamente a un médico para ajustar el tratamiento.