Naltrexona

¿Qué es esto?

Compuesto

La naltrexona está disponible en forma de tabletas e inyección. El principal ingrediente activo del fármaco es el clorhidrato de naltrexona. Proporciona el principal efecto terapéutico. Además del principio activo, el medicamento también contiene componentes auxiliares que ayudan a estabilizar la fórmula y garantizar una absorción adecuada en el cuerpo.

Los excipientes pueden incluir:

• Lactosa: para mejorar la textura de la tableta y su estabilidad.
• Celulosa microcristalina: para crear la estructura de la tableta.
• Crospovidona: para asegurar una rápida desintegración de la tableta después de tragarla.
• Estearato de magnesio: para evitar que los componentes se peguen y proporcionar una superficie suave de la tableta.

Cada componente se selecciona cuidadosamente para garantizar la máxima eficacia y seguridad del fármaco.

¿Cómo tomar?

El uso de naltrexona debe realizarse bajo la supervisión de un médico, ya que un uso inadecuado puede reducir la eficacia del tratamiento o provocar efectos secundarios. El medicamento generalmente se toma diariamente en forma de tableta o una vez al mes en forma de inyección.

Para tomar los comprimidos se recomienda seguir las siguientes instrucciones:

1. Tome el medicamento según las indicaciones de su médico, generalmente 50 mg una vez al día.
2. La tableta debe tragarse entera con abundante agua. Es mejor tomarlo a la misma hora todos los días para mantener un nivel estable del medicamento en el cuerpo.
3. Es importante no saltarse dosis ni cambiar la dosis sin consultar a su médico. Si omite una dosis, tómela lo antes posible, pero si se acerca la hora de la siguiente dosis, puede omitir la dosis omitida.

¿Cómo funciona?

La naltrexona actúa bloqueando los receptores opioides en el cerebro. Estos receptores suelen ser activados por medicamentos opioides, lo que provoca una sensación de euforia y reducción del dolor. Cuando una persona toma naltrexona, los ingredientes activos del fármaco se unen a estos receptores, previniendo los efectos de los opioides y bloqueando sus efectos.

Este mecanismo ayuda a reducir los antojos de opioides y alcohol, ya que el paciente ya no obtiene las sensaciones placenteras de usarlos. Además, la naltrexona ayuda a prevenir las recaídas porque al intentar consumir opioides, una persona no experimenta el efecto esperado, lo que reduce la motivación para consumir. Por tanto, la droga ayuda a mantener la sobriedad y al cese a largo plazo de la adicción.

Indicaciones

La naltrexona se usa para tratar y mantener la remisión de la adicción a opioides y alcohol. Se utiliza como parte de una terapia integral que incluye asesoramiento y apoyo conductual. El fármaco es especialmente eficaz para personas que ya han completado la fase de desintoxicación y están intentando mantener la sobriedad.

Las principales indicaciones de naltrexona incluyen:

• Mantenimiento de la sobriedad en pacientes dependientes de opioides que han sido sometidos a desintoxicación.
• Tratamiento de la dependencia del alcohol para reducir los antojos y prevenir recaídas.
• Prevención de recaídas en pacientes en proceso de desintoxicación de recuperación de la adicción.

La prescripción del medicamento debe ser realizada por un médico después de una evaluación exhaustiva del estado del paciente para garantizar que el tratamiento con naltrexona sea lo más eficaz y seguro posible.

Contraindicaciones

El uso de Naltrexona tiene una serie de contraindicaciones que se deben tener en cuenta antes de iniciar el tratamiento. Esto se debe a que el medicamento puede interactuar con ciertas condiciones y causar efectos no deseados. Las principales contraindicaciones son condiciones en las que el uso de naltrexona puede resultar peligroso.

Las contraindicaciones incluyen:

• Insuficiencia hepática aguda o enfermedad hepática grave, ya que la naltrexona se metaboliza en el hígado y puede agravar la afección.
• Dependencia activa de opioides. Los pacientes deben someterse a una desintoxicación antes de comenzar el tratamiento, ya que tomar naltrexona puede provocar síntomas de abstinencia agudos.
• Embarazo y lactancia, a menos que un médico evalúe que los beneficios superan los riesgos potenciales para el feto o el bebé.

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• Hipersensibilidad a la naltrexona o cualquiera de los componentes auxiliares del medicamento.

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Efectos secundarios

Aunque la naltrexona suele ser bien tolerada por la mayoría de los pacientes, como cualquier otro fármaco, puede provocar efectos secundarios. La mayoría de las veces aparecen al comienzo del tratamiento y pueden desaparecer a medida que el cuerpo se adapta. Sin embargo, es importante estar atento a las posibles reacciones para poder consultar rápidamente a un médico si es necesario.

Los efectos secundarios más comunes incluyen:

• Náuseas o vómitos, especialmente en los primeros días de uso.
• Dolores de cabeza, que pueden variar en intensidad.
• Somnolencia o fatiga, que pueden afectar las actividades diarias.
• Dolor muscular o articular, a veces asociado con debilidad general.
• Sequedad de boca o cambios en el apetito.

Si los efectos secundarios se vuelven graves o continúan durante mucho tiempo, se recomienda consultar a un médico. En casos raros, pueden ocurrir reacciones más graves, como problemas hepáticos, que requieren atención médica inmediata.